¿Demasiado tiempo libre? Oh, quizás sí {Damon}

Todavía tenía unas horas en las que la luna regnaría antes del regreso del sol por la mañana, unas largas horas muertas, sin saber que hacer, durante el día dormía, pero, ¿Durante la noche? ¿Qué cosas se podían hacer? Oh, claro que sí se me ocurría la más apetitosa de todas y estaba relacionada con la muerte de algún humanito y ese delicioso líquido que corría por las venas de todos los de esa raza, la raza humana. A la que hacía solo un día y poco más que ya no pertenecía, había pasado de ser la víctima al predador, un predador feroz y despiadado que les arrebataba ese preciado líquido para ambos. Los hijos de la noche nos alimentabamoa y existiamos gracias a ese líquido, y los humanos... Ellos lo necesitaban para vivir, sin sangre por sus venas, simplemente, morían sin remedio.
Era extraño lo rápido que había asumido eso, que ya no era humana, a diferencia de otras cosas que eso comportaba, cosas que me costaban de asumir, matar, beber sangre, ser inmortal, quemarme con el sol... La lista era larga.
Paseaba por Mystic Falls, el silencio regnaba en el lugar y solo mis pasos y algun animalillo rompían el silencio. Empecé andando y acabé corriendo. Sintiendome libre por unos segundos, la gran velocidad me hacía sentir bien y era agradable no pensar en nada de nada, y así, llegué a la plaza de Mystic Falls.

Me había pasado gran parte de la noche en una iglesia abandonada que había por los bosques de Mystic Falls. Solía ir un par de noches al mes, ahí me ponía a pensar con claridad todo lo que me estaba sucediendo, era una forma de desahogarme sin tener que hacerlo en público. Había estado sentando en el primer banco largo de color marrón y sucio, quitaba la suciedad con una pañuelo que llevaba. Ahora mi cabeza tenía que estar solo pensando en varias de proteger a Elena, pero también recordaba bastante a Rose, su muerte era una de las peores cosas que me había pasado durante estos últimos tiempos. Había estado pensando en varias cosas que me había dado la conclusión que lo que tenía que hacer era dejar de pensar y disfrutar un poco, aunque ahora no podía disfrutar mucho ya que como siempre, tenía que proteger a Elena, yo quería protegerla de todo pero a veces era algo cansando el tener que estar detrás de ella para que no la hagan daño, tenía bastante cariño a Elena y tenía miedo de que ese cariño poco a poco se estuviera transformando en más, aunque sabía perfectamente que me quedaba poco para enamorarme de ella o a lo mejor por la muerte de Rose estaba confuso, tenía que ser eso.

Ahora me encontraba caminando por los bosques, quería probar un poco de sangre humana pero no tenía ganas de hacerlo, supongo que lo haría mañana por la noche cuando tuviera la mente un poco más recuperada, si se le podía llamar así. Al final, decidí correr para salir de los bosques y llegar hasta la plaza de Mystic Falls, allí se encontraba otra chica que tenía que ser una vampira, me acerque lentamente hacía ella.-Hola.-comenté con un tono de voz frío, simplemente esa era mi forma de saludar, solía ser bastante frío con la gente desconocida, aunque si era vampira supongo que podría tener una buena conversación con ella.

Pasé la lengua por mi labio superior eliminando cualquier rastro de sangre, esta vez había bebido sin marcharme la ropa, solo la boca de forma algo grotesca, pero la mayor parte me la había limpiado antes de llegar a la plaza con un pañuelo que casualmente traía encima y bueno, lo que quedaba acababa de limpiármelo ahora mismo.

Me toqué el pelo echándomelo hacía atrás con gracia, en un gesto de puro aburrimiento habitual en mí, me tocaba mucho el pelo, aunque, en general solía arreglarme bien, aunque estos dos últimos días no lo hubiera hecho tanto, me veía bien, después de comer había recuperado un tono de piel más saludable y me sentía llena de energía. Pensaba también con mayor claridad una vez saciada mi sed.

Me pareció escuchar unos pasos, y me giré desde donde estaba, de pie en el medio de la ya mencionada plaza. Mi mirada se poso en un chico, el cual distinguí como otro Vampiro, el cual se acercaba a mí con pasos lentos.
Esperé a que se acercara sin apartar mi mirada de él y escuché su río saludo, tampoco me esperaba otra cosa, y eso mismo hubiera recibido y recibiría de mí. Era un desconocido, y no me fiaba de los desconocidos.

-Hola- saludé con el mismo tono y en una leve sonrisa enigmática se curvaron mis labios, adoptando la clásica actitud distante y de perfección que mostraba yo. Me fijé ahora mejor en el chico. Era atractivo y guapo, sí, también eso, no se podía negar, con sus ojos azules y su buen físico era alguien de buen ver.

La vampiresa respondío a mi saludo, su sonrisa era bastante bonita y creo que nos podriamos llevar bien aparte desde la muerte de Rose no había encontrado alguna compañera aparte que mi hermano. Si me llevaba bien con ella y ella no tenía a nadie más, creo que la invitaría a mi casa, ya que estaba bien ser amigo de otros vampiros menos con los humanos, para no hacerles daño, aunque a mi me gustaba la sangre de humano.

-Soy Damon, vivo en Mystic Falls ¿y tu eres del pueblo?.-pregunté bastante curioso mientras me terminaba de acercar a ella a paso lento. Aunque a lo mejor quisiera ser su amigo, no me terminaba de fiar de esta vampiresa ya que sonrisa era preciosa pero a la vez maliciosa, como la que tenía Katherine, fue mejor no acordarme de ella.

Creo que presentarme a ella sería la mejor opción y asi nos conoceriamos mejor, aparte luego le contaría a mi hermano de que había visto a una nueva vampira en Mystic Falls, me preguntaba donde se encontraría ahora mi hermano bueno a lo mejor con Elena en su habitación...

Había posibilidades de que me llevara bien con él, algo que no estaria nada mal, no tenía compañia y bueno, la sangre humana era deliciosa, pero prefería no acercarme a humanos, ya que acabaría lamentablemente por hacerles daño tarde o temprano, lo sabía ya bien. Y no era precisamente mi intención, no todo el tiempo.

Se presentó a la vez que me pregunta sí era del pueblo, negué con la cabeza con suavidad y observé como acababa de acercarse a paso lento.

-Soy Anabelle y no, no soy de Mystic Falls, encantada Damon-dije dejando notar mi acento francés, el cual no se me notaba normalmente, había aprendido Inglés desde pequeña, de hecho mi madre era de por aquí, no de Mystic Falls, pero si de una ciudad cercana.

Presentarme no había sido una mala idea, no lo creía al menos así, era una buena forma de entablar conversación con alguien.
Miré a ambos lados, contemplando mejor la plaza y volví a mirar al atractivo vampiro-Todo esta tan tranquilo a esta hora, ¿Es tranquilo de día?-pregunté con curiosidad en mi voz, no podía salir de día, por lo que no había podido comprobarlo yo misma, pero bueno, él debía de llevar tiempi aquí y seguramente lo sabría.

Echaba en falta el poder exponerme con tranquilidad a los rayos del sol y disfrutar de su calidez, poder pasear durante el día, con luz, mirar escaparates y cosas así de simples, cosas que antes eran algo normal, algo que no valoraba.

Así que no era una vampira de Mystic Falls, creo que iba a ser realmente interesante conocerla aparte tenía un acento francés bastante bonito. Creo que ahora sentía un poco de curiosidad por saber más de la chica, aunque todavía no me debería fiar mucho de ella hasta que no la conozca mejor.

-¿Y vas a visitar más veces Mystic Falls? ¿Y que haces por aquí?.-pregunté con bastante curiosidad, creo que tendría que estar seguro de que sus intenciones en este pueblo eran buenas aparte una vampira que no es de Mystic Falls y esta aquí tiene que ser por un buen motivo, o eso creo, a lo mejor simplemente estaría de visitar pero bueno por preguntar no iba a pasar nada.

Una sonrisa pícara miraba a los ojos de la chica, aparte de tener que saber con seguridad aquí, creo que también era una chica guapa, si era de fiar la pondría visitar mi casa y mi habitación y seguro que ella aceptará, como las demás.

-Si, Mystic Falls es un sitio bastante tranquilo, ¿Porque lo quieres saber?.-pregunté mientras me despeinaba un poco el pelo, creo que luego le tendría que decir a mi hermano que he conocido a una nueva vampira, ya que tendría que investigarla un poco para saber que es de fiar.

Escuché sus preguntas, parecía que quisiera saber más de mí, aunque bueno, yo también tenía curiosidad por saber sobre él-Sí, me gusta Mystic Falls, de hecho me quedaré un tiempo en las afueras y bueno, hace poco vivía en otra ciudad de Virginia pero "Mystic Falls" es un nombre que me gustó y simplemente vine aquí-dije, no era mentira, aunque bueno, tenía órdenes de no decir exactamente donde vivíamos ni nada que me delatara o información concreta sobre mí o los demás del ejercito, si lo hacía, Samuel me mataría, me lo había dicho, me amenazaba con ello a menudo, no le gustaba mi forma de actuar o el hecho de que tenía una facilidad increíble para meterme en líos, no haberlo sabido antes era solamente su culpa, ¿Acaso no me habían observado antes de elegirme para unirme a sus filas? Sin duda no había acertado.
-¿Y tú? ¿Has vivido siempre en Mystic Falls? ¿Eres de por aquí? pregunté con curiosidad, tenía el mismo derecho a indagar que él.
Igual podía llegar a fiarme de él, lo veía difícil, más que nada porque poco podía o estaba dispuesta a contar de mí y por ende él haría igual pero no perdía nada.
Escuché la respuesta a mi pregunta seguida de una pregunta por su parte, si que le gusta preguntar pensé, aun así respondería, lo raro sería que no lo hiciera -No tengo la suerte de poder salir durante el día como para comprobarlo- dije sonriendo levemente, era algo que me desagradaba, hacer una vida meramente nocturna no era de mi agrado.
-¿Tú si puedes salir de día?- le pregunté mirándole a sus bonitos ojos azules.

Anabelle contestó a mis preguntas sin poner ningún problema a eso, creo que no estaba contestando con sinceridad o a lo mejor que si, creo que era bastante desconfiado de los demás aparte parecía buena chica, en mi cabeza rondaba la opción de fiarme si o no de ella, creo que antes deberías saber más cosas para terminarme de fiar de ella aunque seguro que a ella también la interesaría saber cosas de mi, esperó que no pregunté nada, ya que no la iba a contar nada sobre mí todavia.-Es raro que un vampiro aparezca por Mystic Falls sin ningún motivo, anda se sincera conmigo y dime que haces aquí, puedes confiar en mí se guardar secretos y para nada soy un chivato.-comenté con una sonrisa, haber si Anabelle picaba en mi trampa creo que no lo haría porque se podía notar que era una chica bastante inteligente.

-Bueno llevó un par de meses por aquí aunque hace unos años también estuve viviendo en Mystic Falls.-supongo que por decirle esto no me iba a pasar nada, pero creo que no la contestaría a ninguna pregunta que tuviera relación con mi estado actual o con mi pasado, así que si yo fuera ella tendría cuidado con lo que preguntaba, por su propio bien.

Ella comentó que no tenía el anillo para salir a la luz del día yo por suerte si lo tenía.-Vaya lo siento es una lástima yo si puedo salir a la luz del sol, por suerte.-comenté con una sonrisa, la verdad es que a mí no me gustaba pasarme el día en casa y por suerte tenía la opción de salir en el día.

Respondí a sus preguntas, aunque era elección suya ver si se fiaba o no de mí, yo no tenía muy claro si fiarme de él, igual no era un mal tipo, pero eso de ir fiándose de todo el mundo no era una buena idea ni mucho menos mi estilo o forma de actuar habitual, esperaba que él fuera con cuidado con lo que preguntara, no iba a contarle nada de mi vida humana, es decir de mi pasado ni tampoco iba a darle muchos detalles sobre mi vida en general.

Escuché lo que dijo y enarqué una ceja, si realmente esperaba que picara estaba siendo inocente, no era tan tonta como para picar en ello.
Aun así sonreí -¿Esperabas que funcionara? Siento decepcionarte pero es una trampa un tanto simple, realmente espero que pensaras que perdías el tiempo con ello- dije, no sabía bien si realmente creía que iba a funcionar o si solamente lo había probado, para ver si por casualidad caía en su trampa.
Parecía que a según que preguntas si estaba dispuesto a responder, aunque realmente lo que con lo que le había preguntado no tenía forma de obtener o información valiosa o útil sobre él.

Las preguntas que le hacía eran banales, poco importantes, preguntas que podías responder sin decir realmente nada importante o no muy importante.

Cuando respondió a mi pregunta miré su mano fijándome esta vez en el anillo que llevaba -Bonito anillo- comenté mirando el anillo para luego desviar la mirada al cielo para ver qué hora era, constatando que todavía tenía unas largas horas de oscuridad por delante y que por tanto no corría peligro en el exterior y finalmente volver a mirarle. Me aparté un mechón de pelo de la cara, me estaba cansando de estar de pie y quieta, me gustaba moverme, aunque solo fuera andar un poco
-¿Te apetece pasear?- le pregunté, si no quería era simple, me iría yo solita, no tenía problema en ello, no quería seguir quieta.

Se notaba que él era bastante inteligente y que también era desconfiado, aunque bueno, no le culpaba por ello, yo tampoco confiaba del todo en él, era mejor así, era mejor no acabar de fiarse de nadie, por si acaso, además de que según tenía entendido había 3 vampiros como mínimo que dificultarían lo que había planeado Samuel para el día en que fuera la fiesta de el objetivo de los Neófitos, creo que era una humana llamada Elena, aunque si bien no sabía exactamente el nombre de ella o los que la protegían ni tampoco porque queríamos a Elena, a mi ciertamente me daba igual, pero apreciaba mi vida como obedecer, de desobedecer Alex o Samuel me matarían fácilmente, o cualquiera de los otros, sin contar a Edward, a ese podía vencerle fácilmente.
Pero basta de pensar en ello, el día de la fiesta me mantendría lo más al margen que pudiera.

Una sonrisa maliciosa se dibujo en el rostro de él, sí, así dejaba claro que tenía alguna intención, pero no es que fuéramos a ser discretos ni mucho menos, se vería bien claro que queríamos o eso creía yo, tendría que hablar con Alex de ello.

Escuché lo que dijo y sonreí-Sí, puede que acabes sabiéndolo Damon-dije simplemente sin ningún tipo de emoción más bien resignación, no tenía demasiadas ganas de que llegara la fiesta, tanto obedeciendo como desobedeciendo mi "vida" correría peligro, igual terminaba muerta, pero, quizás era lo mejor, no era una perspectiva muy halagüeña, pero sería una forma de conseguir la libertad, eso de acatar órdenes no me gustaba y menos teniendo en cuenta que no sabía ni porque tenía que hacer lo que me ordenaban y teniendo en cuenta que no tenía nada en contra los humanos y matar sin saber porque... No, no era de mi agrado.
No dije nada cuando respondió a mi pregunta afirmativamente sino que empecé a andar con tranquilidad mirando al suelo para luego mirar al chico cuando este hablo, sus intenciones las veía claras o eso creía, pero ir a su casa, igual había más vampiros, igual era una trampa, así que no respondí instantáneamente sino que sin dejar de andar empecé a pensar rápidamente en las opciones que tenía.